diumenge, 4 de març del 2012

Excursión al yacimiento de Tambuc (Millares)


Desde Buñol, iniciamos nuestra ruta en coche hasta Dos Aguas, dejando Buñol  a nuestra derecha. Son unos  kilómetros de algunas curvas, campos cultivados y montaña. Tenemos que pasar por Alborache y Macastre para llegar a Dos Aguas, el último pueblo de la comarca de la Hoya de Buñol-Chiva.
 En Dos Aguas nuestra ruta inicia un descenso vertiginoso en dirección a Millares a lo largo de la carretera CV-580, que bordea el barranco del Bosque. Un bosque de obra reciente y atrevido diseño salva el discurrir del más importante río valenciano. Después de cruzar el río Júcar, una dura subida nos llevará hasta Millares, dejando un kilómetro antes de llegar, y desde nuestra derecha, una carretera que lleva a Cortes de Pallás.



 MILLARES

 Millares tiene claras reminiscencias árabes. Es un pueblo pequeño pero muy atractivo, lleno de pendientes y  en la falda de una montaña. Conserva restos de tres castillos en sus cercanias. En la parte baja del pueblo nos detenemos para almorzar. Hay una especie de barranco en la zona denominada Fuente las Donas, con una balsa y poco más. Como se nos ha hecho tarde sacamos nuestros bocadillos y nos disponemos a pegar un bocado. El entorno no es muy bonito pero sí las vistas del pueblo. Cabe destacar que nuestro destino principal es el yacimiento de huellas de dinosaurios del Tambuc, en el término municipal de este pueblo, pero mucho más adelante.

 DESPUÉS DEL ALMUERZO


 Después de almorzar, seguimos carretera adelante y, entre curva y curva, encontramos un desvio a nuestra izquierda que nos lleva al llamado salto del Millares, donde se encuentra una central eléctrica y unas vistas extraordinarias del río Júcar desde arriba. Es un desvio que luego tendremos que volver a recorer en dirección opuesta para volver a la carretera principal y seguir nuestro viaje.  Esta zona está encajonada entre los vertiginosos farallones del río. El lugar es duro y agreste, pero de gran energía. En las zonas de umbría de los barrancos que bajan al encuentro del Júcar, se descubren ejemplares de sabinas, encinas y bosques de pinos.

 PANELES DE INFORMACIÓN


 HUELLAS DE DINOSAURIOS

 Con la vista al salto de Millares y la continuación de nuestra ruta en dirección a Bicorp, las panorámicas se abren de manera espectacular sobre el discurrir encajonado del río Júcar. Por el Levante se nos muestra cómo el gran río valenciano crea una barrera física y psicológica insalvable con su discurrir profundo, todo él encajado por estrechuras y riscos. Por el Poniente encontramos el más grande desierto valenciano. El Macizo del Caroig y la Muela de Cortes, conforman un espacio vacio de actividades humanas e infraestructuras. En definitiva, otra barrera física y demográfica. Después de cruzar infinidad de barrancos, trás unos 17 kilómetros desde que dejamos Millares  y dejarnos sorprender por el paisaje de soledad y silencio alcanzamos nuestro principal destino, el Yacimiento de Tambuc.
 El yacimiento está bien señalizado a nuestra izquierda. En él se han hallado huellas de dinosaurios, con el mayor número de icnitas, más de doscientas, de las tierras valencianas. La zona también cuenta con abrigos y cuevas con pinturas rupestres de la época del Neolítico, entre ellas destacan la Cueva Las Donas, Las cañas y las Ventanas. Además se han descubierto restos de ocho poblados de la Edad de Bronce. Tenemos que decir que cuando vayais a visitar las huellas, caminad también por el lecho del barranco durante un buen rato. No sólo os comformeis con las primeras huellas, porque más adelante hay más cantidad y mejores. Echamos en falta unos banquitos o mesitas para poder comer más comodamente, pero eso no fue óbice para sacar nuestros  bocatas y, como siempre, entre amigos, entablar una buena conversación, comer  y relajarnos en medio de la nada.




Por la tarde llega nuestra segunda parte del recorrido, la carretera que va cruzando la Canal de Navarrés y nuestra llegada a Anna.
  Después de pasar Bicorp, Quesa, Navarrés, Bolbaite y Chella, llegamos a Anna. En  este pueblo queriamos llegar a la albufera, pero estaba atardeciendo y decidimos contemplar el famoso Gorgo de la Escalera, muy próximo a la población. En él, el río ha creado un gran cañón de profundas aguas cristalinas al que se accede a través de 136 escalones. Sus aguas se precipitan en un "gorgo", formando una gran cola de caballo que llaman "El Salto". Debido a su situación poco accesible a los rayos del sol, este tiene una de las aguas más frías de Anna. Antiguamente daba vida a una pequeña central hidroeléctrica. El gorgo está próximo al campo de fútbol. En sus frías aguas puede darse un baño o simplemente relajarse con la contemplación del paisaje y el sonido del agua que se precipita en forma de cascada en las profundidades del barranco. Es un lugar digno de ver.
 Ya de noche y después de no dejar de hablar y hablar...(hacía tiempo que no nos veiamos), nos dirigimos a Valencia  a descansar. Esperamos una próxima excursión.

GORGO DE LA ESCALERA

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